Nueva York, EE.UU.- Las drogas ilícitas y el crimen organizado son obstáculos para el Estado de derecho y la democracia, representan una amenaza clara a la estabilidad y la seguridad de regiones enteras, así como al desarrollo económico y social.
Un reporte de Naciones Unidas del 11 de marzo dice que, así lo subrayó hoy el director general de la Oficina de la ONU contra la Droga y el Delito (UNODC), Yury Fedotov durante la reunión de la Comisión de Estupefacientes en Viena, en la que participan más de 1,000 representantes de gobierno y de la sociedad civil.
Fedotov alertó que los países debilitados por un desarrollo sostenible deficiente pueden convertirse en zonas de operaciones de las redes delictivas e instó a romper con el círculo destructivo que generan.
Por otra parte, mencionó los logros en el declive de la producción y consumo de cocaína, aunque indicó que esas tendencias pueden revertirse por el aumento de la fabricación de drogas sintéticas.
Oipol & Oijust 
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