Cinco detenciones por explotación sexual de refugiados ucranianos en España.
Los presuntos traficantes de personas habrían atraído a sus víctimas con acuerdos sobre el estatus de refugiados y falsas promesas laborales.
Oipol & Oijust operando en el continente europeo | Europol comunicación y fotos, junio 21 de 2024 | Cooperación, traducción y edición Oipol & Oijust, junio 24 de 2024 – Europol apoyó a la Policía Nacional española en el desmantelamiento de un grupo criminal implicado en la trata de seres humanos con fines de explotación sexual. Los sospechosos, supuestamente, atrajeron a las víctimas ucranianas con promesas de conseguirles visas de refugiados, apoyo financiero y trabajo.
La jornada de acción del 24 de mayo de 2024 en Almería dio lugar a:
*5 detenciones, incluido el presunto líder, (1 español, 2 rusos y 2 ucranianos).
*14 víctimas identificadas.
*5 ubicaciones registradas.
*Incautaciones de dos vehículos de lujo, dinero en efectivo, equipos electrónicos, contratos de trabajo en el sector servicios y otros documentos diversos, relacionados con el club donde las víctimas eran explotadas.
El grupo criminal, activo desde 2020, presuntamente reclutaba a sus víctimas en línea, principalmente a través de plataformas de redes sociales, presentándose como gerentes de una agencia de contratación.
Las víctimas fueron atraídas con ofertas de trabajo para azafatas y puestos de atención al público. Luego, los presuntos traficantes habrían explotaron a las mujeres, principalmente ucranianas, pero también de nacionalidad bielorrusa, en un club de prostitución en El Ejido (Almería), España.
Las víctimas fueron reclutadas por su nacionalidad y llevadas a España con visas de turista, mientras se les habría prometido trabajo legítimo en la industria del entretenimiento y el turismo. Una vez en España, recibieron instrucciones de solicitar protección temporal debido a la guerra en Ucrania. Tras este proceso, a las víctimas se les concedió la residencia española. A las jóvenes, supuestamente, se les prometieron beneficios de autorización de trabajo que vienen con esta protección.
Los damnificados fueron engañados por los sospechosos. Las víctimas no recibieron ningún contrato de trabajo y luego fueron explotadas mediante actividades de prostitución. El grupo criminal generó enormes ganancias ilegales mediante la explotación de un gran número de mujeres. Las víctimas fueron alojadas en tres viviendas proporcionadas por el mismo individuo que regentaba la discoteca (centro de la acción criminal). Al aislar a las víctimas del resto de la sociedad, los traficantes intentaron minimizar los riesgos de detección policial o de fuga de las mujeres, posibilitando a los supuestos delincuentes restringir, controlar y explotar plenamente a las víctimas.
Europol facilitó el intercambio de información y proporcionó apoyo analítico continuo a la investigación. El día de la acción, Europol desplegó a un experto sobre el terreno para comprobar la información operativa en tiempo real, proporcionado a los expertos posibles pistas y apoyo técnico.
Oipol & Oijust 
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